sábado, 12 de septiembre de 2009

Doce horas para Almeida


Llama la atención que el duelo oficial por la muerte del comandante Juan Almeida se limite a doce horas. Es posible que obedezca a criterios establecidos en cuanto al cargo político que desempeñaba la persona a la hora de morir. Sin embargo, tal parece que la dirección del gobierno cubano ha establecido una jerarquía en la cantidad de horas de luto, en preparación de lo que podría ser una serie de fallecimientos, dentro de un período relativamente corto de tiempo, de desetacadas personalidades del gobierno y la revolución cubana.
Por otra parte, indudablemente también influye el hecho de que en la últimos años las funciones de Almeida fueron simplemente protocolares, como recibir nuevos embajadores y presidir la Asociación de Combatientes de la Revolución.
Pero desde el punto de vista simbólico, la importancia de Almeida es mucho mayor.
Almeida era uno de los tres miembros vivos del primer círculo del gobierno cubano con el grado de ''Comandante de la Revolución'', junto a Ramiro Valdés y Guillermo García. Era vicepresidente del Consejo de Estado y miembro del poderoso Buró Político del PCC y diputado.
Acompañó a Fidel Castro en el frustrado asalto al Cuartel Moncada en 1953, en prisión, en el exilio en México, en la expedición del yate Granma (1956) y en la lucha en la Sierra Maestra.
Además el único hombre de la raza negra que había logrado llegar tan alto en el mando cubano y además de origen humilde, no perteneciente a la clase media y clase media alta, como la mayoría de quienes hicieron la revolución.
El duelo oficial fue establecido de las 08H00 a las 20H00 locales (12H00-00H00 GMT) del domingo, cuando la población podrá rendirle homenaje en salones habilitados con sus fotografías en las capitales de las 14 provincias de la isla.
Sus restos ''no serán expuestos'' y serán inhumados con honores militares en fecha aún por precisar, en el Mausoleo del III Frente Oriental Mario Muñoz Monroy, del que fue fundador y su único jefe, en las montañas de la suroriental provincia Santiago de Cuba, según su última voluntad, de acuero al comunicado del gobierno.
Fotografía: comandantes de la revolución cubana durante el juicio a los expedicionarios de la fracasada invasión de Bahía de Cochinos, el 20 de abril de 1962.
De izquierda a derecha, Guillermo García, Juan Almeida, Augusto Martínez Sánchez, Sergio Del Valle (Keystone/Getty Images).

5 comentarios:

Anónimo dijo...

LLama la atención,es posible,sin embargo,,,,,hay frases que quedan para siempre y estas suyas para el olvido,,el comandante Almeida era ante todo un artista,respeto.sol

Anónimo dijo...

pensaba lo mismo amigo anonimo, Alejandro, lo que escribes aqui, aunque es respetuoso es un poco elucubrar con supuestos. No hay ninguna duda que Almeida dijo bien clarito que no querian gran show con su muerte y se le a respetado.

Anónimo dijo...

Que viva por siempre el Comandante Almeida en el corazon de todos los cubanos y cubanas

Anónimo dijo...

El luto puede durar lo que sea, pero la imagen y la trayectoria de Almeida son ejemplares y viviran entre los recuerdos y enseñanzas de la 1ra Revolucion Socialista en America

Anónimo dijo...

Ni revolución ni socialismo hay en Cuba. Eso es puro cuento. Lenguaje heroíco para engatuzar a unos y disfraz para algo que lo necesita.

Muy mal lo de las autoridades cubanas al impedir que JJ Almeida acudiera al funeral de su padre.

La comezón del exilio revisitada

A veces en el exilio a uno le entra una especie de comezón, natural y al mismo tiempo extraña: comienza a manifestar un anticastrismo elemen...