La Iglesia Católica se ha lanzado a una campaña de negar la comunión a los políticos que apoyen leyes a favor del aborto. Desde el punto de vista ideológico, esta medida es consecuente con el credo de la institución. Ahora bien, el problema es que esta misma institución no se ha mostrado igualmente severa, a lo largo de la historia, a la hora de darle la comunión a buen número de asesinos.
Por motivos políticos, el clero nacional en algunos momentos o en otros la totalidad de la Iglesia como institución se ha puesto de parte no sólo de los políticos más reaccionarios, sino también de los más corruptos y sanguinarios.
En este sentido, el presidente del Congreso de los Diputados de España, José Bono Martínez, ha respondido al criterio de un grupo de obispos, que consideran que los políticos que voten la reforma de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo no pueden recibir la comunión. La Iglesia les señaló como "hombres públicos pecadores".
El político socialista señala que no puede olvidar ´´los muchos crímenes de (Augusto) Pinochet a la vez que recuerdo a este asesino tomando la comunión", invoca Bono, tercera autoridad del Estado, quien ha asegurado a la agencia EFE que no es "un asesino, y Pinochet era un asesino desalmado al que se le dio la comunión de manera vergonzosa. No puedo dejar de ver la imagen de Pinochet comulgando y a mí me califican de pecador público".
2 comentarios:
Y cuando el Rey firme la ley ¿el Santo Oficio le negará a Juan Borbón la hostia?
Excelente analisis,Armengol.Lo mismo pasa en Honduras,todos los que desplazaron al presidente elegido en las urnas,reprimieron al pueblo que se opuso,no solo reciben la comunion sino que uno de ellos es que las da.Ironia o cinismo?
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