La muerte de Orlando Zapata Tamayo es un llamado para que se reconozcan internacionalmente las difíciles condiciones en que se encuentran los prisioneros de conciencia cubanos. Debe servir de alerta también, ante una de las tácticas preferidas por el régimen de La Habana: degradar siempre a sus opositores.
Un paso de avance en este sentido es la declaración de Amnistía Internacional (AI), que el viernes nombró a Darsi Ferrer, director del Centro de Salud y Derechos Humanos ``Juan Bruno Zayas'' de La Habana, prisionero de conciencia, y pidió al gobierno cubano su inmediata e incondicional liberación.
En un comunicado, la organización denunció que Ferrer está detenido desde julio de 2009 acusado de obtención ilegal de bienes, un delito que habitualmente no comporta cárcel, que está en una cárcel de máxima seguridad en La Habana, donde la mayoría de los presos han cometido actos violentos, y que no ha sido juzgado, de acuerdo a un cable de la agencia Efe. Con Ferrer, ya hay 55 prisioneros de conciencia en la isla, según la organización.
``La acusación contra Darsi Ferrer es claramente un pretexto. Pensamos que ha sido detenido como castigo por su trabajo para promover la libertad de expresión en Cuba'', manifestó en la nota Gerardo Ducos, investigador de AI sobre Cuba.
Amnistía explicó que el delito que se le imputa suele ser competencia de un juzgado local, pero que en este caso está siendo tramitado por la Fiscalía General, lo que ``añade argumentos a la opinión de que este caso tiene una motivación política''.
Al igual que está tratando de hacer con el médico Ferrer, La Habana ahora presenta al albañil Zapata Tamayo como un delincuente común, que estaba preso por diversos delitos y había agredido a sus carceleros. En ambos casos, hay una motivación en difamar a los opositores: rebajarlos en su condición ciudadana, reducirlos a seres antisociales. Con frecuencia el gobierno cubano echa mano a una serie de recursos viejos pero eficaces: el insulto y la vejación como arma; la divulgación de mentiras, que en ocasiones se apoyan en elementos aislados de verdad, pero que en su totalidad presentan un panorama falso; la visión desplazada que deforma la perspectiva de conjunto y la demonización del enemigo. No hay originalidad en este empeño, empleado con éxito anteriormente por la Alemania nazi, la Unión Soviética de Stalin y la China de Mao.
En sus primeros años, la ideología castrista propuso la imagen de una sociedad mejor pero futura. El ataque político se elaboraba a partir de un discurso dirigido fundamentalmente contra una clase social, capitalista y explotadora.
La deformación del lenguaje se producía de dos formas. La abstracción servía como un medio para despersonalizar y tergiversar las palabras. Se hablaba de la ``liquidación'' de la explotación, el ``ajusticiamiento'' de los traidores y la ``recuperación'' de las propiedades del ``pueblo''. Al mismo tiempo, se deshumanizaba a los opositores: ``gusanos'', ``escoria'' y ``parásitos'' en Cuba; ``perros rabiosos del capitalismo'' en China y ``vampiros'', ``bastardos'' y ``piojos'' en la desaparecida Unión Soviética.
Por supuesto que el recurrir a esos recursos tuvo un precio. El lenguaje ideológico del castrismo nació deforme por naturaleza, por encima de cualquier intención verdadera o bastarda de justicia social, y comenzó a deteriorarse desde su origen.
Los factores contradictorios contribuyeron a ese deterioro: el fracaso en la concretización de su modelo ideal y los éxitos en la exclusión de sus enemigos tradicionales. Las exitosas campañas represivas, por momentos de verdadero terror, apuntaron hacia el exterminio o la segregación de una clase social, y lo lograron. De forma similar y diversa el comunismo y el fascismo habían empleado el mismo recurso, y con anterioridad los imperios coloniales y esclavistas, aunque con distintos argumentos. Pronto Cuba se vio libre de ``explotadores capitalistas''.
Por años se prefirió ignorar a los disidentes, catalogar como ``vicios del pasado'' todos los intentos de crítica e identificar con la ``sociedad anterior'' a quienes se oponían al sistema. La permanencia en el poder fue erosionando esos argumentos. El golpe más formidable ocurrió con la crisis que culminó en el puente marítimo Mariel-Cayo Hueso, cuando miles que eran niños en 1959 o nacidos después de esta fecha, y trabajadores carentes de propiedades, decidieron o se vieron forzados a abandonar el país. Ello obligó al gobierno a recurrir a una difamación menos política y más vulgar. El ataque frontal a los ``enemigos de clase'' se sustituyó por las vejaciones y los epítetos. Las palabras más repetidas fueron ``prostitutas'', ``homosexuales'' y ``proxenetas'' (claro que en sus versiones más crudas).
El albañil Zapata y el médico Ferrer son por edad ``hijos de la revolución'', por el color de su piel pertenecen a esa raza que precisamente la revolución triunfante proclamó que iba a reivindicar y darle la posibilidad de una integración plena, pero también seres humanos que individualmente, y sin ponerse de acuerdo, posiblemente sin siquiera conocerse, decidieron pensar y actuar por ellos mismos. Esto último puede llegar a convertirse en un delito en Cuba. Como hasta el momento ha sido imposible cambiar la ley, lo que el régimen ha decidido es convertir en delincuentes a las víctimas.
Un paso de avance en este sentido es la declaración de Amnistía Internacional (AI), que el viernes nombró a Darsi Ferrer, director del Centro de Salud y Derechos Humanos ``Juan Bruno Zayas'' de La Habana, prisionero de conciencia, y pidió al gobierno cubano su inmediata e incondicional liberación.
En un comunicado, la organización denunció que Ferrer está detenido desde julio de 2009 acusado de obtención ilegal de bienes, un delito que habitualmente no comporta cárcel, que está en una cárcel de máxima seguridad en La Habana, donde la mayoría de los presos han cometido actos violentos, y que no ha sido juzgado, de acuerdo a un cable de la agencia Efe. Con Ferrer, ya hay 55 prisioneros de conciencia en la isla, según la organización.
``La acusación contra Darsi Ferrer es claramente un pretexto. Pensamos que ha sido detenido como castigo por su trabajo para promover la libertad de expresión en Cuba'', manifestó en la nota Gerardo Ducos, investigador de AI sobre Cuba.
Amnistía explicó que el delito que se le imputa suele ser competencia de un juzgado local, pero que en este caso está siendo tramitado por la Fiscalía General, lo que ``añade argumentos a la opinión de que este caso tiene una motivación política''.
Al igual que está tratando de hacer con el médico Ferrer, La Habana ahora presenta al albañil Zapata Tamayo como un delincuente común, que estaba preso por diversos delitos y había agredido a sus carceleros. En ambos casos, hay una motivación en difamar a los opositores: rebajarlos en su condición ciudadana, reducirlos a seres antisociales. Con frecuencia el gobierno cubano echa mano a una serie de recursos viejos pero eficaces: el insulto y la vejación como arma; la divulgación de mentiras, que en ocasiones se apoyan en elementos aislados de verdad, pero que en su totalidad presentan un panorama falso; la visión desplazada que deforma la perspectiva de conjunto y la demonización del enemigo. No hay originalidad en este empeño, empleado con éxito anteriormente por la Alemania nazi, la Unión Soviética de Stalin y la China de Mao.
En sus primeros años, la ideología castrista propuso la imagen de una sociedad mejor pero futura. El ataque político se elaboraba a partir de un discurso dirigido fundamentalmente contra una clase social, capitalista y explotadora.
La deformación del lenguaje se producía de dos formas. La abstracción servía como un medio para despersonalizar y tergiversar las palabras. Se hablaba de la ``liquidación'' de la explotación, el ``ajusticiamiento'' de los traidores y la ``recuperación'' de las propiedades del ``pueblo''. Al mismo tiempo, se deshumanizaba a los opositores: ``gusanos'', ``escoria'' y ``parásitos'' en Cuba; ``perros rabiosos del capitalismo'' en China y ``vampiros'', ``bastardos'' y ``piojos'' en la desaparecida Unión Soviética.
Por supuesto que el recurrir a esos recursos tuvo un precio. El lenguaje ideológico del castrismo nació deforme por naturaleza, por encima de cualquier intención verdadera o bastarda de justicia social, y comenzó a deteriorarse desde su origen.
Los factores contradictorios contribuyeron a ese deterioro: el fracaso en la concretización de su modelo ideal y los éxitos en la exclusión de sus enemigos tradicionales. Las exitosas campañas represivas, por momentos de verdadero terror, apuntaron hacia el exterminio o la segregación de una clase social, y lo lograron. De forma similar y diversa el comunismo y el fascismo habían empleado el mismo recurso, y con anterioridad los imperios coloniales y esclavistas, aunque con distintos argumentos. Pronto Cuba se vio libre de ``explotadores capitalistas''.
Por años se prefirió ignorar a los disidentes, catalogar como ``vicios del pasado'' todos los intentos de crítica e identificar con la ``sociedad anterior'' a quienes se oponían al sistema. La permanencia en el poder fue erosionando esos argumentos. El golpe más formidable ocurrió con la crisis que culminó en el puente marítimo Mariel-Cayo Hueso, cuando miles que eran niños en 1959 o nacidos después de esta fecha, y trabajadores carentes de propiedades, decidieron o se vieron forzados a abandonar el país. Ello obligó al gobierno a recurrir a una difamación menos política y más vulgar. El ataque frontal a los ``enemigos de clase'' se sustituyó por las vejaciones y los epítetos. Las palabras más repetidas fueron ``prostitutas'', ``homosexuales'' y ``proxenetas'' (claro que en sus versiones más crudas).
El albañil Zapata y el médico Ferrer son por edad ``hijos de la revolución'', por el color de su piel pertenecen a esa raza que precisamente la revolución triunfante proclamó que iba a reivindicar y darle la posibilidad de una integración plena, pero también seres humanos que individualmente, y sin ponerse de acuerdo, posiblemente sin siquiera conocerse, decidieron pensar y actuar por ellos mismos. Esto último puede llegar a convertirse en un delito en Cuba. Como hasta el momento ha sido imposible cambiar la ley, lo que el régimen ha decidido es convertir en delincuentes a las víctimas.
14 comentarios:
Así mismo es, Armengol. 100% de acuerdo.
bueno y zapata era d los 75 o es cierto q era un preso comun q se convirtio en disidente
excelente
Oye Armengol, como podrás observar tus artículos son totalmente contradictorios. Estás en el floting down. Los gusanillos hoy te aplauden, los comancagastróficos hoy te piden el güiro. Los gusanillos están perplejos porque hoy te tocó irle pa'rriba a los cagastróficos y defender a los gusanillos. Mañana será al revés y tú, tan tranquilo. Defínase, hombre o sigue en receso.
Voy a hacer algunas consideraciones sobre tu artículo que estoy seguro no te gustarán, como no les gustará a los Rogocianos, Tintanes, Matusalenes y otros aberrados críticos de todo lo que huela a Cuba en los comentarios de las noticias del Herald. Por tanto, te doy permiso para que te abstengas de publicar este comentario, si así lo deseas.
"...difíciles condiciones en que se encuentran los prisioneros de conciencia cubanos."
Eso es repetir las inmundicias del exilio radical. Zapata no era prisionero de conciencia, era delincuente común.
"Debe servir de alerta también, ante una de las tácticas preferidas por el régimen de La Habana: degradar siempre a sus opositores."
A los opositores no hace falta degradarlos; ellos solitos están degradados. Recibir dinero en nombre de su “batalla” contra el régimen es una degradación moral.
"Un paso de avance en este sentido es la declaración de Amnistía Internacional (AI), que el viernes nombró a Darsi Ferrer, director del Centro de Salud y Derechos Humanos ``Juan Bruno Zayas'' de La Habana, prisionero de conciencia, y pidió al gobierno cubano su inmediata e incondicional liberación."
Amnistía Internacional puede decir lo que le salga de sus profundidades y eso no quiere decir que son los que tengan siempre la verdad en la mano. Por tanto, el paso de avance es para ti.
"Al igual que está tratando de hacer con el médico Ferrer, La Habana ahora presenta al albañil Zapata Tamayo como un delincuente común, que estaba preso por diversos delitos y había agredido a sus carceleros. En ambos casos, hay una motivación en difamar a los opositores: rebajarlos en su condición ciudadana, reducirlos a seres antisociales."
Sólo por la conveniencia de los interesados en la difamación, los argumentos de AI son una verdad como un puño, mientras tratas de acusar al régimen castrista de presentar al albañil Tamayo como un simple trabajador, un albañil (que no por gusto lo adjetivas de esa manera) de "el bueno" de la película. El albañil Tamayo era un preso común, con delitos comunes, por muy albañil que fuese.
Continuación...
"…la visión desplazada que deforma la perspectiva de conjunto y la demonización del enemigo."
Querido Armengol: ¿quién demoniza a quién? Poner a Cuba en la lista de países que apoyan el terrorismo es…ah, sí, Armengol, "angelizar" a Cuba, mientras Cuba demoniza a sus enemigos!
"No hay originalidad en este empeño, empleado con éxito anteriormente por la Alemania nazi, la Unión Soviética de Stalin y la China de Mao."
Y de la USA de cualquier presidente!
"…gusanos'', ``escoria'' y ``parásitos'' en Cuba; ``perros rabiosos del capitalismo'' en China y ``vampiros'', ``bastardos'' y ``piojos'' en la desaparecida Unión Soviética."
Y, por supuesto, se te olvidó poner: los “ángeles comunistas” como se les llamaba en USA. ¿Recuerdas la caza de brujas?
"El albañil Zapata y el médico Ferrer son por edad ``hijos de la revolución'', por el color de su piel pertenecen a esa raza que precisamente la revolución triunfante proclamó que iba a reivindicar y darle la posibilidad de una integración plena."
Te gusta colocar las ocupaciones de Zapata, el albañil, Ferrer, el médico, “hijos de la revolución”, por el color de su piel han carecido de integración plena. Te recuerdo que en las prisiones de Cuba hay una buena cantidad de blanquitos, mulatitos y otros negritos que son tan delincuentes como los anteriores. El delinquir no va con el color de la piel ¿o dices lo contrario? ¿O eres partidario de que se liberen a todos los negros que sean delincuentes para que no te acusen de racista y en aras de su integración plena?
"…lo que el régimen ha decidido es convertir en delincuentes a las víctimas."
Y ahora USA entrega a otros países a los “delincuentes” que estaban presos en Guantánamo, entre estos países España, donde ya se les acoge con permiso de trabajo y todas las bondades de la democracia puesto que han estado varios años presos sin juicio ni causa alguna y ahora son, de la noche a la mañana, inocentes de todo cargo.
Continuación...
Digo todo esto pues observo en el cachumbambé en que te mueves, representando un día a un observador neutral, independiente, justo, promoviendo noticias de Cuba que no le gusta a la rama radical del exilio y otro te apareces con artículos como éste que te ponen del lado de los de esa misma rama radical. Léete sino los comentarios que aparecen en tu columna del Herald y verás la sorpresa de los gusanillos radicales, mientras otras veces te piden la cabeza.
Parece que la pausa que has tenido te ha convencido de qué lado debes estar. El día que te lea criticando la muerte de mayores y niños por “equivocaciones” de los defensores de la democracia en Afganistán con la misma vehemencia que, en tus ratos de ocio, describes la situación de los presos de conciencia en Cuba o tu defensa al albañil Zapata (que voluntariamente y no por “equivocación”, murió), ese día te creeré y creeré en tu periodismo independiente. ¿O es que para ti la vida de alguien que decide no comer en protesta por lo que sea es más valiosa que la vida de decenas de civiles que no están en este mundo porque "me equivoqué", (aunque, señores castristas, soy mejor que ustedes, ya pedí disculpas!)? Todos callan con elaborada complicidad ante tales hechos, nadie exige el respeto de los derechos humanos de estas personas muertas. Esas no son personas, no al menos de la misma categoría que el albañil Zapata y el médico Ferrer. Por cierto, Armengol, no veo paso de avance alguno en AI cuando no critica esas muertes equivocadas. Por lo que no te fíes mucho de AI.
Mis saludos
Anonimo 11:22. Suponiendo que no fuera de los 75 y que haya sido un preso comun, que no lo creo, porque todos sabemos las bajezas que utilizan los verdaderos delincuentes que gobiernan en Cuba,como ser humano no se merece el trato que tuvo este muchacho, al igual que todos los demas que guardan prision este paisito.
pero la mama agradecio el trato q recibio a los medicos q lo vi en la tv,entonces q ?
Otro punto,Armengol.
No he visto una critica tuya(disculpame si la hiciste,no la he visto)cuando amenazaron a los patrocinadores del programa de Edmundo,comerciantes locales,para que retiraran sus anuncios.El motivo:Edmundo expresa opiniones que no les gusta a los que nos sacan el dinero del bolsillo para costear vacaciones,viajes en yates,mercedes benz,paseos en gondola,lexus,etc,etc.
Las ironias del destino,los mismos que apoyaron eso,hoy ruedan comerciales de viajes a Cuba.Democracia?NO,escaces de $$$$.
No te llama la atencion que todos los puntos de vista oficiales,en todos los medios,incluido el que te paga,tengan el mismo angulo?
Eso es democracia?
Aunque tu no lo creas,tambien te lee gente que ha estudiado en la Universidad,graduados en Cuba,como tu,gracias a ese gobierno que debemos criticar sus excesos pero nunca del lado que empobrece a la comunidad.
Si lo que escribes puede perjudicar tu empleo,no te busques problemas,ya hay demasiados desempleados viviendo bajo los puentes(que luego llaman depredadores,en consonancia con tu critica),dedicate al arte:pintura,libros,peliculas,etc.Eres bueno en eso.
Para hablar mierdas de Cuba ya hay bastante mediocres en tu periodico,que no saben hacer otra cosa.
Ya salieron los comecandelas castristas, que son iguales que la derecha bruta de aca, cuando de descaro y defender lo indefendible se trata. Quisieran que Armengo se "definiera", que para ellos es que se pusiera siempre de parte de ellos. Que se convirtiera en una repetidora mas de Radio Reloj, o Progreso etc. Una cotorra mas. Pero Armengol piensa y ve lo que todo el mundo ve y lo dice. Eso es todo.
Para pepito
http://arch1.cubaencuentro.com/opinion/20051010/247965d7fa9786a54888b4586633fd2f.htmlara
Gracias,Armengol.No lo habia visto.Excelente analisis.Todo un contraste con el actual.Muy objetivo aquel y muy superficial este.En fin,somos humanos.Todo no puede quedarnos con calidad.
Espero entiendas mi critica.Te considero ademas de inteligente,de principios.Si carecieras de alguna de las dos no me tomara el trabajo en escribir.
Saludos.
Si tuvieran que pagar por la atencion medica y pagarsela la familia, junto con el precio del velorio, no hubieran tantos auto-martires
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