Un artículo de Reuters coloca en
perspectiva el viaje del Chong Chon Gang, con relación a la economía y política
de Corea del Norte, al tiempo que de forma indirecta señala las semejanzas
entre los regímenes de La Habana y Pyongyang, así como las similitudes en la
situación de ambos países.
Incluso para los criterios de la ruinosa
flota de carga de Corea del Norte, que suele transportar contrabando y utiliza
los buques hasta que se hunden, el reciente intento fallido de llevar armas
cubanas a través del Canal de Panamá era un negocio arriesgado, señala el cable
de Reuters.
Sorprendido transportando narcóticos en
Ucrania en 2009, el barco Chong Chon Gang ya era conocido para las agencias de
la ley y navegaba por aguas que son observadas de cerca por Estados Unidos
antes de que fuera detenido en Panamá la semana pasada.
Sólo llevar una bandera de Corea del
Norte es suficiente para que un barco genere sospechas de las autoridades
portuarias y guardias costeras de todo el mundo.
Corea del Norte es tristemente célebre
por operar una de las flotas marinas mercantes más inseguras del mundo, una
colección de 250 barcos oxidados que en su mayoría tienen décadas de
antigüedad.
Con tantos ojos sobre Corea del Norte y
sus barcos, el viaje del Chong Chon Gang “manifiesta desesperación y estupidez”,
dijo Hugh Griffiths, del Instituto Internacional de Investigación para la Paz
de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés).
“No hay otro lugar en el planeta, en
altamar, donde sea más probable que ocurra una intercepción que el Caribe,
debido a que es el patio trasero de Estados Unidos y es donde ha ocurrido la mayor
cantidad de intercepciones”, agregó Griffiths, quien dirige un programa de
SIPRI para contrarrestar el tráfico ilegal.
Los barcos norcoreanos siempre están bajo
una estrecha supervisión debido a las sanciones de la ONU que fueron impuestas
después de que Pyongyang realizó una serie de pruebas nucleares que comenzaron
en 2006 y la carga parece ser una violación a esas sanciones.
Los viajes al Hemisferio Occidental son
inusuales para los barcos norcoreanos, que en su mayoría llevan carga barata
como chatarra y granos para alimentar ganado en aguas asiáticas.
“Los barcos son pequeños y la mayoría de
su comercio es muy cercano a Corea del Norte, es inusual verlos tan lejos de
casa”, dijo Richard Hurley de IHS Maritime, una firma de análisis de seguridad
con sede en Londres. “Ciertamente es inusual verlos en el Caribe y transitando
por el Canal de Panamá”, sostuvo.
No se sabe por qué el Chong Chon Gang y
sus 35 tripulantes asumieron el riesgo de pasar por el Canal de Panamá, en
lugar de viajar a casa a través de una ruta más larga, menos visible.
Pero el hecho es que transportaba
toneladas de azúcar de Cuba en un aparente pago como trueque por la reparación
de los misiles, una señal de lo ansiosa que está Corea del Norte por suministros
básicos.
Si bien Corea del Norte se ha recuperado
de una hambruna de la década de 1990, el endurecimiento de las sanciones de
Naciones Unidas y un mayor distanciamiento de sus vecinos ricos Corea del Sur y
Japón en los últimos años también han mantenido al país con poco dinero y pocas
cantidades de alimentos.
Hurley utilizó información del Sistema de
Identificación Automática y datos de satélites para seguir a los cinco barcos
con bandera norcoreana que transitaron por el Canal de Panamá en los últimos
tres años.
Un barco, el O Un Chong Nyon Ho, pasó por
el canal y atracó en La Habana en mayo de 2012. Salió de Corea del Norte y
siguió la misma ruta “directa de ida y vuelta” que el Chong Chon Gang, que Cuba
dice que transportaba armas a Corea del Norte para ser actualizadas.
Los otros barcos norcoreanos seguidos por
Hurley recorrieron el Caribe y viajaron al sur hasta Brasil en un “tránsito
normal, tan normal como cualquier viaje norcoreano puede ser”, afirmó.