El secretario de Estado estadounidense,
John Kerry, dijo el domingo que la evidencia indica que un misil ruso fue
utilizado para derribar el vuelo MH17 de Malaysian Airlines, mientras que Gran
Bretaña sostuvo que Rusia se enfrenta a la posibilidad de convertirse en un
Estado "paria", informa la agencia Reuters.
En el principal lugar del accidente,
donde los trabajadores de emergencia habían embolsado decenas de cuerpos el
sábado, todo había sido eliminado la mañana del domingo.
Ucrania acusó a los rebeldes separatistas
de ocultar pruebas relacionadas con el derribo de un avión comercial ocurrido
el jueves en el este de Ucrania, que originó la pérdida de 298 vidas.
En tanto, un líder separatista prorruso
dijo que algunos elementos del avión, entre los que podrían estar las
"cajas negras", estaban ahora en manos de los rebeldes.
En medio de la creciente ira de Occidente
por lo que ven como una falta de respeto hacia los cuerpos por parte de los
rebeldes que controlan el lugar del accidente, cerca de 200 cadáveres fueron
subidos a vagones refrigerados en Torez, a unos 15 kilómetros de distancia.
“Son cadáveres. Trajeron los cuerpos
durante la noche”, dijo a Reuters un funcionario de la estación de trenes de la
ciudad.
Funcionarios de la OSCE, el organismo de
seguridad europea, pudieron inspeccionar algunos de los vagones del
ferrocarril.
Moscú niega su participación en el
derribo del avión y ha culpado del hecho a las fuerzas armadas de Ucrania. Pero
Washington y sus aliados apuntan a que la responsabilidad recae en los
separatistas prorrusos, que cuentan con el respaldo de Moscú y que han
obstruido el acceso al lugar del accidente.
Kerry dijo que Estados Unidos había
detectado el paso de suministros a Ucrania desde Rusia en el último mes,
incluyendo una caravana de 150 vehículos blindados, tanques y lanzacohetes
destinados a los separatistas.
Estados Unidos interceptó conversaciones
sobre una entrega a separatistas del sistema de misil ruso guiado por radar
SA11, el cual ha sido indicado como el culpable del derribo del Boeing 777.
“Está bastante claro que este es un
sistema que fue trasladado desde Rusia”, dijo Kerry en una entrevista a la CNN.
Gran Bretaña dijo que Moscú podría verse
aislado si no usa su influencia para garantizar el acceso seguro al lugar del
accidente y coopera con los investigadores internacionales.
“Rusia corre el riesgo de convertirse en
un Estado paria si no actúa bien”, dijo el secretario de Relaciones Exteriores,
Philip Hammond, a la cadena de televisión Sky.
El derribo del avión de pasajeros ha
incrementado fuertemente la crisis en Ucrania y podría marcar un punto de
inflexión en los esfuerzos internacionales para resolverla.
Ministros de la Unión Europea deberían
estar dispuestos a anunciar una nueva ronda de sanciones contra Rusia en una
reunión del Consejo de Asuntos Exteriores del bloque que se realizará la
próxima semana, dijo un comunicado de la oficina del primer ministro británico,
David Cameron.
Los líderes europeos ya acordaron presionar
al presidente ruso, Vladimir Putin, para garantizar que los investigadores
tengan libre acceso al lugar del accidente.
El Consejo de Seguridad de Naciones
Unidas está considerando un proyecto de resolución para condenar el ataque,
demandar a los grupos armados a que permitan el acceso al lugar del accidente y
pedir a los estados de la región que cooperen con una investigación
internacional. Esto podría ser sometido a votación el lunes.
Holanda, cuyos ciudadanos componen dos
tercios de las 298 víctimas del vuelo que iba de Ámsterdam a Kuala Lumpur, dijo
el sábado estar “furiosa” por el trato dado a los cadáveres esparcidos en un
campo abierto y pidió ayuda a Ucrania para que “nuestra gente” retorne a casa.
El presidente de Estados Unidos, Barack
Obama, dijo que el desastre es una muestra de que es hora de poner fin al
conflicto de Ucrania, mientras que Alemania aseguró que esta es la última
oportunidad de Moscú para cooperar.