Algunos disidentes, miembros del exilio
aquí en Miami y políticos republicanos enfrentan un problema que no reconocen:
cada día su discurso amenaza no solo con tornarse anticuado sino irreal.
Para denunciar la dictadura castrista, la
represión en Cuba y la falta de derechos humanos en la isla no es necesario
repetir esquemas gastados. Basta con mostrar los hechos.
Pero una cosa son los hechos y otra es
una retórica que suena cada día más alejada de la nación cubana. Más lamentable
aún es que se conviertan en repetidores del discurso de un sector de Miami, quienes
pueden elaborar uno propio a partir de su conocimiento del país en que todavía
tienen fijada su residencia.
Un vocero de la oficina del congresista
John Boehner, presidente de la Cámara de Representantes, dijo que la presencia
del opositor cubano Jorge Luis García Pérez ‘‘Antúnez “ destaca la continuidad de la
tiranía en Cuba y el coraje de aquellos que luchan contra ella’’.
Es cierto que la tiranía continúa, mucha
verdad el coraje de quienes se enfrentan a ella. Pero la presencia de un
opositor en un acto de esta naturaleza, en el Congreso de Estados Unidos, lo
que indica es un cambio de la situación cubana.
En una carta al gobernante cubano Raúl
Castro, en agosto del año pasado, el opositor se refirió al gobernante como
“Señor dictador y genocida” y a los cambios promovidos por Raúl como “fraudulentos”,
de acuerdo a una información en El Nuevo
Herald.
Sin embargo, que el opositor no fuera
detenido y condenado por ello, también indica un cambio en los tiempos que
corren en Cuba.
“Hay muchos cubanos, fuera y dentro de
Cuba, que tenemos una posición coherente y no aceptamos ni reconocemos estos
acuerdos entre el presidente Obama y la dictadura cubana. La resistencia cubana
está presente y hay que contar con ella, aunque el presidente Barack Obama no
lo ha hecho”, destacó Antúnez.
“El futuro de Cuba se va a decidir dentro
de Cuba”, afirmó el opositor.
“No vamos a aceptar ese cambio fraude y
cosmético que ustedes fraguan”, agregó el disidente. “Las únicas reformas por
nosotros aceptadas serían las que, a partir de su derrocamiento o abandono del
poder, realizará el pueblo desde su base”, agregó.
Muchos que viven fuera de la isla
coinciden con el planteamiento de que el futuro del país se debe decidir entre
los que permanecen allí. También mantienen la esperanza de que algún esfuerzo
propio se materialice en este sentido
Antúnez estuvo encarcelado 17 años. Luego
de ello, ha viajado en reiteradas ocasiones al exterior y regresado a Cuba. En
la isla no han ocurrido actividades opositoras de mayor repercusión —ni
aparecen reflejadas tanto por la prensa independiente como por los
corresponsales extranjeros— llevadas a cabo por Antúnez o el grupo que
representa en los últimos tiempos.
Hace 11 meses se conoció una declaración
de Antúnez, de que suspendía una huelga de hambre de 11 días, diciendo que
quería unirse a protestas callejeras planeadas en apoyo a la lucha en pro de la
democracia en Venezuela.
Hasta la fecha no se ha conocido más sobre estas anunciadas protestas.
Hasta la fecha no se ha conocido más sobre estas anunciadas protestas.