Casi un 60% de naciones se encuentra en
un alto riesgo de usar trabajo esclavo en sus cadenas de suministros, de
acuerdo a un nuevo índice global dado a conocer el jueves, que coloca a Corea
del Norte como el país que tiene el peor historial de trabajo esclavo en el
mundo. Por su parte, Cuba no figura en un lugar prominente en la relación.
Mediante el análisis del tráfico humano o
esclavitud, las leyes nacionales y la especificidad y profundidad de las leyes
para evitar este tipo de labor en 198 naciones, la firma de análisis de riesgo
Verisk Maplecroft encontró que 115 naciones se encontraban en un riesgo elevado
o extremo de utilizar esclavos.
“Pocas naciones en el mundo son
actualmente inmunes a la esclavitud moderna”, señaló Alex Channer, un destacado
analista de derechos humanos de Verisk Maplecroft.
Cerca de 46 millones de personas en todo
el mundo están viviendo como esclavos, obligados a trabajar en fábricas, minas
y granjas, vendidas para el comercio sexual, atrapadas en la servidumbre por
deudas o nacidas presas de un sistema que les obliga a la servidumbre, de
acuerdo al Índice Global de Esclavitud para 2016 del grupo de derechos humanos,
la Fundación Walk Free, informa la agencia Reuters.
El índice está destinado a ayudar a los
negociones en la identificación de los países con mayor riesgo de explotar
trabajo esclavo.
De acuerdo a la directora de la
fundación, Fiona David, se calcula que “dos tercios de los aproximadamente 46
millones de personas que viven en condiciones de esclavitud se encuentran en
Asia. Hablamos de trabajadores forzados en las fábricas de ladrillos, niños
mendigos en Afganistán y la India, gente que trabaja la tierra o en el sector
textil obligada por sus deudas. La creciente población y su integración en las
cadenas de valor globales de la región de Asia y el Pacífico puede dar como
resultado unos costos laborales muy bajos en la producción de bienes y
servicios que todos nosotros consumimos”, de acuerdo a una entrevista aparecida
en el servicio de radiodifusión alemán Deutsche
Welle.
En relación a Corea del Norte, la organización
estima que unos 100.000 ciudadanos fueron enviados fuera del país para trabajar
en condiciones equivalentes al trabajo forzado, a cambio de divisas para
Pyongyang.
El régimen norcoreano requiere trabajo
sin compensación económica por parte de adultos, niños escolarizados y
estudiantes universitarios, y opera un extenso sistema de campos de trabajo,
según apunta la fundación en su informe.
En el caso de Cuba, las cifras que brinda
la organización en su índice
son las siguientes:
Estimado de personas viviendo bajo un
régimen de esclavitud moderna: 37.800.
Porciento estimado de la población
viviendo en esclavitud: 0,332%.
Población: 11.390.000
Vulnerabilidad respecto a la esclavitud
moderna: 32,05/100.
Este último índice es inferior al
norcoreano (45,84/100) y también a los de Haití (43,65/100) y República
Dominicana (38,13/100). Por su parte, estos son los indicadores para Estados
Unidos (27,50/100) y España (24,16/100).
Respecto a la posición de predominio de
la esclavitud en los países, los indicadores son los siguientes (una posición
con mayor predominio ocupa los primeros lugares en el listado de 167 países):
Corea del Norte 1, Haití 8 y República Dominicana 8, Cuba 35, EEUU y España 52.
En diversas ocasiones ha sido denunciada
la explotación laboral de los ciudadanos por parte del Gobierno cubano.
Según un pacto entre Brasil y Cuba que
fue negociado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la agencia
regional dependiente de la Organización Mundial de la Salud de las Naciones
Unidas, el Gobierno brasileño le pagará a Cuba el equivalente de $4.080
mensuales —o casi $ 49.000 al año— por cada uno de los médicos cubanos,
escribió el periodista Andrés Oppenheimer en un artículo de agosto de 2013 que reprodujo el diario uruguayo
El País.
La Federación Nacional de Médicos
Brasileños, Fenam, ha dicho que “los contratos de los médicos cubanos tienen
todas las características del trabajo esclavo”. Según el contrato negociado por
la OPS, llamado Mais Medicos (Más
Médicos), Brasil le paga a Cuba los $ 4.080 mensuales por médico, y luego Cuba
le paga a los médicos una fracción del total. Y ahí está, precisamente, el
problema: ni Brasil, ni Cuba, ni la OPS dicen qué porcentaje del salario pagado
por Brasil le pagará Cuba a los médicos cubanos, escribe Oppenheimer.
Solidaridad sin Fronteras, una
organización con sede en Miami que ayuda a los médicos cubanos en todo el
mundo, dice que el Gobierno cubano paga a los médicos que trabajan en Brasil y
en otros países entre $250 y $300 mensuales, es decir alrededor del 7% del
salario pagado por Brasil al Gobierno cubano. El 93% restante va a parar a los
bolsillos del Gobierno cubano, dice el grupo. “Es un sistema de esclavitud
moderna“, me dijo en una entrevista Julio César Alfonso, presidente de
Solidaridad sin Fronteras, agrega el periodista.
En febrero de 2010, siete médicos y un
enfermero cubanos demandaron a Cuba, Venezuela y a la empresa estatal de este
último país PDVSA por presunta conspiración para obligarles a trabajar en
condiciones de “esclavos modernos”, como pago por la deuda cubana con el Estado
venezolano por suministro de petróleo, denunció Amnistía
Internacional.
Los demandados, “intencional y
arbitrariamente”, colocaron a los profesionales de la salud en “condición de
servidumbre por deuda” y estos se convirtieron en “esclavos económicos” y
promotores políticos, según el documento de la demanda presentada en EEUU.
El 22 de agosto de 2015 alrededor de
medio centenar de cubanos que abandonaron las misiones médicas de Venezuela se
concentraron en Bogotá para denunciar "el limbo legal" en que se encontraban
casi mil de ellos que permanecían a la espera de un visado para EEUU y habían
agotado su tiempo de estancia regular en Colombia
Según datos oficiales de Migración
Colombia, en total 720 cubanos habían ingresado en el país en lo que iba de año
de manera irregular tras desertar en Venezuela.
Actualmente, según esos datos, 117 de
ellos estaban a la espera del visado estadounidense, mientras que 603 ya habían
deportados en lo que iba de 2015.
Sin embargo, ese dato contrastaba con el
que manejaban los propios cubanos ya que, según explicó el médico José Ángel
Sánchez, desde enero hasta la fecha estimaban que alrededor de 1.600 habían
ingresado a Colombia.
“Nosotros somos esclavos modernos, tomé
la decisión de abandonar la misión para buscar una mejor solvencia económica”,
destacó entonces la médico Inalbis Lao Miniel.
Lao Miniel explicó que con el salario que
percibían en Venezuela “apenas cubren las necesidades básicas de cualquiera” y
debían vivir en infraviviendas, lo que hizo que se contagiara con dengue.
El problema de los cubanos que llegan a
Colombia en la búsqueda de una vía para llegar a EEUU continúa presente
actualmente.
En una información de Cubanet
se denunció las pésimas condiciones de vida en que se encontraban los presos
cubanos en los campamentos de corte de marabú y producción de carbón en 2015.
“Casi siempre están ubicados en lugares
distantes y solitarios, y por lo general
no permiten la visita de familiares para evitar que se conozcan las verdaderas
condiciones de vida de los reos que allí laboran“, relata la información de Cubanet.
“Declaraciones de algunos presos durante
una visita al Campamento de Reclusos de Guasimilla, en el municipio granmense
de Bayamo, trasladados allí desde la prisión Provincial de Las Mangas para
cumplir con parte de su castigo, desempeñándose como carboneros, ponen al
desnudo la lamentable historia de dolor y esclavitud moderna que viven a diario”,
agregaba Cubanet.
En julio de 2015 Cuba y Malasia salieron
de la lista de EEUU de países que no combaten la trata de personas y la
esclavitud moderna, una medida que fue criticada por un legislador demócrata y
activistas.
“Las mejoras a la calificación de Malasia
y Cuba son ejemplo de la politización del informe y el sello de aprobación a
países que no han tomado las medidas básicas para hacer honor a esta mejora”,
consideró entonces el senador demócrata Robert (Bob) Menéndez.
El 31 de julio de 2016 la agencia de
noticia oficial cubana Prensa
Latina publicó la información de que la primera ministra británica, Theresa
May, anunció ese día que el primer grupo especial confeccionado para hacer
frente a la esclavitud moderna va a ser establecido en Reino Unido, en aras de
erradicar dicho lastre.
“La ley de esclavitud moderna presentada
por May, primera de su tipo en Europa, permite la aplicación de nuevas
sanciones para aquellos que subyuguen o esclavicen a sus similares”, señalaba
Prensa Latina.
Es evidente que una ley similar no puede
establecerla el Gobierno cubano. Al menos que esté dispuesto a sentarse en el
banquillo de los acusados.